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DECLARACION DE LA FUERZA BOLIVARIANA DE TRABAJADORES

Opinión
DECLARACION DE LA FUERZA BOLIVARIANA DE TRABAJADORES
ANTE EL CRECIMIENTO DE LA OLA BOLIVARIANA, LOS SURFISTAS DE LA OPOSICION SE
HUNDEN EN LAS PROFUNDIDADES DE SU DERROTA (Fecha publicación:17/10/2004)

No es extraño que los capitostes de la oposición comiencen a retroceder ante
el arrollador impulso de las fuerzas del cambio. Alfredo Peña, el figurín de
Cisneros y Miguel Henrique Otero, decidió retirar su muy deteriorada
candidatura,
haciendo una finta para tratar de quedar bien: 'no participa por temor al
fraude'.
Lo que no dice Peñita es que su retiro se debe a los desencuentros de la
oposición
que va a estos comicios con, por lo menos tres candidatos: Claudio Fermín, una
especie de Tío Tom, que con su voz engolada y sus modales de chico Harvard
pretende
borrar su ancestral adeco, para vender una imagen progresista que promete
edulcorar
el salto atrás del 'cuanto hay pa'eso' y al disimulado ejemplo neoliberal y
descentralizador
acuñado por su mentor Carlos Andrés en el quinquenio nefasto de 1989-1994. Por
otro lado, Pablo Medina, experto esquirol político que nunca pudo soportar el
liderazgo de Chávez y que su máxima frustración es que habiendo atacado al
Presidente
por supuestas desviaciones de derecha, el Comandante termine de hacer lo que
había que hacer, proteger nuestras principales industrias básicas y estratégicas
de la expoliadora mano de las transnacionales, dar alimentación, salud y
educación
al pueblo y luchar por la recuperación económica de la nación. Esa nación que
hoy este mercenario niega. Y por último Peñita, que siendo el delfín de los
medios
no pudo articular a su alrededor una candidatura unitaria que le permitiera
repetir
al frente de la Alcaldía Mayor de Caracas. Atrás quedaron sus altisonantes
discursos
de reto y provocación, y como sabe que irremediablemente va a perder, prefirió
dejar de lado su poco feliz incursión en política para volver a su tirapiedrísmo
y palangrista periodismo. Cuidado si no es él quien sustituye al Napo en los
excelente guiones de La Hojilla. Pero no es sólo Peñita, otro que anda por ahí
como ánima en pena es Mendosita o 'melcochita' como gusta mentar a Néstor
Francia,
como tampoco le cuadran los números para su reciclaje electoral, estaría
siguiendo
el mismo camino de la renuncia para dedicarse en cuerpo y alma a sus
guardaespaldas
y a la conspiración. Toda esta maniobra de la oposición de renuncias y
separaciones,
radica en ponerle al CNE un plomo en el ala para deslegitimar las elecciones
regionales del 31 de octubre, que evidencian un crecimiento directamente
proporcional
a la disminución de intenciones de voto que tiene cada uno de los emblemáticos
candidatos de la oposición. Y la pregunta es obvia, sino van a medirse en las
elecciones ¿Qué hará la contra en los próximos meses?: 1.- Volver a su plan
original de conspiración y caos para tratar de subvertir nuevamente el orden,
la estabilidad y recuperación económica que se respira en Venezuela desde la
derrota del paro-sabotaje del 2003. 2.- El 15 de agosto, después de la
contundente
demostración de fuerza y decisión del pueblo venezolano, ganamos un tiempo
precioso
e invaluable para lograr la gobernabilidad necesaria en nuestro país, consolidar
las instituciones que nacieron con la V República, y tratar de adecentar la
organización
y la unidad revolucionarias para profundizar el proceso. Por lo que ellos,
concientes
de eso y ante su inminente derrota electoral van a buscar una nueva
confrontación
con o sin sus aliados extranjeros. 3.- Volviendo al esquema de abril de 2002
y de diciembre-enero 2002-2003 con los cuervos, los inadaptados de VenenoVisión
y los de la 'sociedad incivil' volver a poner al país en jaque para imponer su
dictadura de cartón y confeti. La ola crece, indetenible, majestuosa,
arrolladora,
como el alud anunciado en la montaña mas alta, como el mar cuando esta
borrascoso
y enseñorea las costas con sus espumosas ondas que anuncian tiempos nuevos. En
esa ola antes y ahora los eternos surfistas políticos que van deslizándose por
ella para tratar de llegar triunfantes a la orilla para seguir medrando en sus
malas intenciones con sus sinuosos zigzagueos. Pero la ola de la revolución
bolivariana
impetuosa como ella sola, se los ha ido quitando de encima uno a uno o en grupo.
Primero Arias, después Miquilena y su combo de egoísmo mal llamado solidaridad
con los llaneros y cachalotes hundidos en el excremento del diablo y sin sentido
del ridículo, luego el MAS, mas delincuentes, mas negociadores, mas entregados
a los nefastos intereses de una derecha con la cual se sienten mas identificados
que aquellos descamisados que hace mas de 30 años le dieron justificación a su
existencia, los Medina y los Melo, que vendieron su alma por menos de tres
centavos
y por supuesto, los históricos, los que hubiera sido sorprendente verlos
descendiendo
de su olimpo de privilegios para compartir con ese esperanzado pueblo que los
mantuvo cuatro décadas en el poder y luego los desalojo sin ponerles el
preaviso.
Me refiero a AD, COPEI, y sus clones Primero Justicia, Proyecto Venezuela y
demás
hierbas de esa fauna derechista y fascistoide y los sempiternos soldaditos de
plomo de Altamira que hubieran perdido cualquier guerra con solo invocar sus
frustrados egos de desfiles y fiestas de 15 años. Todos ellos, surfearon en
nuestra ola, hicieron sus piruetas para convertir la inmensa ola de la
revolución
en la onda destructiva de lo que soñamos con que el huracán revolucionario
inunde
todas las playas de la América irredenta, donde los verdaderos navegantes como
Bolívar, el Che, y toda una generación de revolucionarios han hecho sacado a
flote los sueños libertarios que le han dado a nuestros pueblos hornadas de
héroes
y mártires, que cuando llegan a la orilla no es en hombros de un naufragio sino
con el paso firme que el buen viento de la liberación le imprime a las velas
de la Revolución. El 31 de octubre la quinta ola llegará a la orilla con la
buena nueva de que una vez mas el pueblo armado con sus remos de dignidad y sus
peñeros y chalanas cargados de esperanzas, ilusiones y sueños, dará el golpe
de timón necesario para rematar esta borrascosa travesía que desde el 6 de
diciembre
de 1998 navega por aguas venezolanas. Jacobo Torres de León Coordinador
General.
Octubre de 2004.

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